sábado, 21 de junio de 2014

TU AMOR ES COMO UN DÍA DE SOL


Un día de sol es despertar con la luz de tu mirada,
un día de sol es recibir tu sonrisa,
un día de sol es percibir tus caricias,
un día de sol es saber que tú me amas.

Un rayo de sol es el brillo de tus ojos,
un rayo de sol es tu rostro iluminado,
un rayo de sol es la calidez de tus manos,
un rayo de sol es saber que tú me amas.

Los días de sol son buenos por su irradiante luz,
por su diáfana brillantez,
por su cálida acogida, como el de un dulce hogar.
El mundo es más hermoso con un día de sol.

El anuncio de un nuevo día,
es la bendición de Dios,
y un rayo de sol te otorga alegría.

Un rayo de sol lo es todo para un ánimo afligido;
un faro brillante en el cielo del día
lo es todo para la tristeza del alma;
la luz esplendente del sol puede cambiar tu vida,
y animar todas tus mañanas.

Por eso, un día de sol solo eres tú en mi vida.


miércoles, 18 de junio de 2014

SÓLO ERAS UN NIÑO


Sólo eras un niño, un hermoso niño de quince años,
y yo sólo era una niña, una niña precoz de quince años,
y te amé entonces y te soñé entonces y te desee entonces.

Sólo eras un niño y sólo querías jugar al grupo de rock,
y yo muerta de celos por todas las demás pequeñas,
que a tú alrededor giraban como mariposas sobre la flor.
Y afortunadamente para mí, tú no las mirabas a ellas,
pero lamentablemente tampoco me mirabas a mí.

Sólo eras un niño de quince años que quería ser cantante de rock,
pero de pronto colocaste toda tu atención en mí,
y dejaste el micrófono, tu anhelado juguete,
y me regalaste tú precioso tiempo, todo tu valioso tiempo.
Y yo no supe porque, hasta que un día me dijiste,
que una noche estuviste en uno de mis sueños,
y que te enteraste de cuanto yo te amaba a ti.

Me contaste que viste corazones volando alrededor,
y nubes de todo color, pájaros de color rosa y violeta,
y árboles floridos, mientras que el pasto era azul cielo…
Entonces yo te escuchaba y trataba de recordar aquel sueño,
aquel sueño que  nunca tuve, pero tú me asegurabas que era mío

Entonces yo decidí creerte y te tomé de la mano
y te dije: TE AMO, y a partir de entonces
yo y tú hermoso micrófono de cantante de rock
fuimos tus adorados juguetes de niño de quince años.


 

domingo, 15 de junio de 2014

Te amo cada día más


Varón, mírame, ¡cuánto ha pasado el tiempo!,
y yo te amo más que ayer,
mucho más que la primera vez que nos vimos.
¿Te puedes imaginar cuánto te amo?

Eres una dulce melodía en mi vida,
eres mi sol, mi luna, mis estrellas,
eres mi mar, mi bosque de fantasías,
eres mi oasis, mi paraíso perdido,
lo eres todo para mí.

Varón, mírame, ¡cuánto ha pasado el tiempo!
Lo terso de tu rostro se fue, quedó en el pasado,
los músculos deliciosos tuyos, ya no están.
Sólo queda un rostro desgastado y sonriente,
y un  cuerpo fortalecido a pesar de los años.
Y yo te sigo amando mucho más que antes.

Varón, mírame, con tus ojos brillantes,
con tú cálida sonrisa, con tu mirada alegre
y tú expresión serena que sabe trasmitirme paz y seguridad.
Mírame con tus ojos de amor,
con los mismos ojos de siempre.

Varón, yo te amo, cómo tú me has amado continuamente,
aunque tú solías decir que tú siempre me amarías más,
mas hoy yo sé que te amo tanto cómo tú me has sabido amar.

viernes, 13 de junio de 2014

UN VERANO EN LA PLAYA


Un verano en la playa eso es lo que queda de ti;
un verano en la playa y nuestro refugio el mar.
¿Recuerdas que me ganabas al nadar?
¿Recuerdas que un día casi me ahogo
y que tú cual héroe pertinente me salvaste de morir?
Pero cómo no lo vas a recordar sí yo lo recuerdo bien.

Un verano en la playa; el sol, la arena, y el mar,
nuestros mudos testigos de nuestro inesperado encuentro.
Yo te amé al ver tu perfecta silueta de espaldas a mí,
al verte todo tú eras perfecto, tu rostro, tu torso, tus muslos,
todo tú eras perfecto.

Más yo una nena inocente que no sabía nada de la vida,
una criatura que era apenas tres años menor que tú,
pero al verte de espaldas ya te había amado
y te había escogido para mí, para mí sola.
Y tú no lo sabías.

Cuando me acerqué a ti, eras mi príncipe,
y yo una vil petiza plebeya, pero agradezco al cielo
que entre tanta princesa a tu alrededor me escogieras a mí
como tú compañera de nado, quizás porque sabía nadar bien,
y era la única que te podía hacer la competencia en tus travesías.

Recuerdo que decías que serías un profesional nadador,
y yo te creía, yo te creía todo lo que tú me decías,
porque yo te amaba y tú lo sabías.
Más nunca me diste un beso, ni siquiera en el rostro,
sólo me tomaste de la mano el día de la fiesta,
nuestra fiesta de despedida,
y bailaste conmigo toda la noche,
y no miraste a nadie más que a mí durante todo aquel baile.

Sabías que te amaba y tú me dijiste a los oídos:
Un verano en la playa me enamoré de ti.
Y luego te alejaste y me hiciste adiós con todo tu hermoso brazo.
Y desde aquella vez nunca más supe de ti.

Pero ahora, después de mucho tiempo que he vuelto
a esta nuestra vieja playa, donde por primera vez nos vimos,
he pedido al cielo el volverte a ver ahí, en el mismo lugar
en el que te hallé por vez primera,
sin embargo, está vez, tú primero me hallaste a mí.

Un verano en la playa, otro verano más…

miércoles, 11 de junio de 2014

JUGANDO A LA RONDA

Gira la ronda en medio de mis recuerdos,
gira la ronda y sólo a ti te veo,
sí, ahí estás tú, sonriente como un rayo de luz,
como una flor de primavera,
ahí estás tú, mirándome fijamente,
mientras gira la ronda y yo te veo.

¿Hace cuánto tiempo no jugamos a la ronda?
¿Hace cuánto tiempo el pasado quedó atrás?
¿Hace cuánto tiempo no te veo a mi lado?
¿Hace cuánto tiempo te marchaste para no volver jamás?

Te cuento que desde entonces, no he vuelto a amar,
te cuento que, desde donde estés, he perdido ya las esperanzas
de volverte a ver, de reencontrar tu sonrisa,
de iluminarme bajo el dulce halo de la luz de tu mirada.
Te cuento que a veces lloro de nostalgia,
y que lo único que me ánima es saber, es sentir, es desear
que aún sigas con vida, para volver a recobrar las esperanzas.

Gira la ronda en medio de mis recuerdos,
todos sonríen mientras jugamos inocentemente,
pero yo sólo a ti te veo mientras tú no apartas de mi tu mirada.
Gira la ronda y yo te sonrío y tú me devuelves la sonrisa,
gira la ronda y nosotros aprendemos a amarnos el uno al otro.
Gira la ronda y ya de pronto vuelvo al presente y tú ya no estás.


lunes, 9 de junio de 2014

A UN MISTERIOSO DESCONOCIDO


Yo no sabía cuán importante eras en mi vida,
hasta que te hallé, y te introduje en ella,
y en mi alma, en mi ser, en mi carne.
 
Yo no sabía cuán importante eras en mi vida,
hasta que decidí amarte,
y solamente porque me robaste una alegría,
y me regalaste, sin darte cuenta, un pedacito de sol.
 
Yo no lo sabía, te juro que no lo sabía;
claro que no voy a negar,
que estaba en busca de alguien como tú, eso sí lo sabía.

Pero de pronto, tú apareciste y me deslumbraste,
me dejaste anonadada, sin aliento, sin respiro,
y con tu presencia te llevaste
un pedacito de mi corazón…
 
Y te juro, que no sé cómo el pobre siguió latiendo,
habiendo sido desgajado de su otra mitad,
y te aseguro que aún estoy en la búsqueda de esa otra mitad,
en medio de ti, para recuperar un poquito de mi independencia.

Pero al parecer tú lo ocultaste en lo muy profundo de tu ser,
para que yo ande divagando tras tu esencia, tú grácil esencia.
Pues estoy segura que a ti no te apetece devolverme mi libertad.